martes, 16 de abril de 2013

DESESPERACIÓN HOTELERA


No, claro, a vosotros os dice el Gafapasta que Harley y yo hemos estado una semana en un hotel y enseguida os pensáis que lo habremos pasado divinamente, y que serìa un spa lujosísimo y divertidísimo y que si os quedáis muertos de envidia envidiosa. Pues todo lo que queráis, pero yo estoy nivel 8 en la Escala Jenny de Indignación Poligonera.

Primero porque las cosas no se hacen así, no señor. Que el Gafapasta sale por la mañana como un día normal, suponiendo que pueda ser normal cualquier cosa relacionada con el Gafapasta, vamos. Y luego que no viene, que no viene, que no viene, y que aparece El Pequeño Monstruo, la hermana del desaborío ese, y nos dice hala, que os vais de hotel, con esa delicadeza que se gasta la ordinariona. Y sin tener tiempo casi para meter un par de bragas y un par de chándals en la bolsa ya estábamos el motero y yo empaquetados. Sin pedirnos opinión ni nada.

Y luego compartiendo habitación con el Viejuno, ufff. Porque con Mami Glenda nos hacíamos las uñas, criticábamos a los famosos, mordíamos el PhotoCall del salón para fastidiar al pijerío humano y me ayudaba a jugar con mi Barbie Albericia y se enfadaba porque decía que cogía fatal los cubiertos. Pero Harley se pone intenso y positivo que te aturde y te ralla.

-Pues yo creo que a lo mejor no vuelven a buscarnos.

Así, con parsimonia y medio bostezando que se debe de creer filósofo estoico como poco. Y yo, pero cómo, cómo, que el Gafapasta raro raruno es pero siempre ha vuelto a recogernos de las vacaciones y a ti lo que te pasa es que eres un soso y un gafe y estás con traumas traumáticos.

-Sí, pero a veces no vuelven.

Halaaa, así el pesado, sin inmutarse, como si le diera igual. Que no disfrutaba ni del restaurante, ni del jacuzzi, ni de las actividades discotequeras. Que ya, que sí, que le abandonó un japuto-palometa de esos, pero a mí también y no me pongo tan intensa ni se me pierde la pizpiretez esta que me posee.

-¿Y si no vuelven?

Y bosteza, el capullo. Así que me decidí a jurar odio canino y eterno al Gafapasta por montarme aquel numerito y dejarme allí tirada sin novio y con tío rancio. Que ya tenía yo toda arreglada la estrategia para morderle bien mordido en la muslería en cuanto se atreviera el muy muy a aparecer por allí. Pero luego claro, llega con el careto desmejorado, nos cuenta que ha estado malito en un hotel para humanos con la salud chunga, nos lleva a saltar y brincar (¡me dejó un montonazo de tiempo sueltaaaaaa!) y me pongo tontona yo y tan feliz de tenerle de vuelta que no hay manera de morderle porque sólo me salen ladridos neuróticos, zalamerías y lametones compulsivos.

Para coherencia, la de las gatas. Que le castigaron con el látigo de su indiferencia durante varias horas y se hasta se pusieron en huelga de hambre diez minutos para no verle, porque dicen que a ellas no se les hacen esos desplantes. Hay que reconocer que dignas son. Absurdas, ridículas y micifuzas. Pero dignas.

jueves, 4 de abril de 2013

MI PRIMER BOLSO


Dicen las noticias que hay un tipo tipo panceta en adobo que se llama Kim Kong Segundo o algo parecido que está volviendo loco al mundo bípedo. Al menos al mundo bípedo imperialista, que dicen algunos. Y resulta que por Santander el tal gorilón tiene una prima, la Mari-Kim, que es amiga del Gafapasta y nada tocineta a pesar del pariente, sino tirando a mona y rizosa. También un poco chunga y peligrosa y seguro que fementida norcoreana de esas que comen perros y levantan puños.

Pero como para chunga y peligrosa aquí la perrina linda, que es poligonera de ley, decidí que era una buena elementa para iniciar mis andanzas navajeras y birlarle algo. Porque birlarle el lazo o la correa a una de esas maltesas que me dan tan mal rollo o a una yorkie pija pues no tiene mérito, que en cuanto les enseñas la pata con liguero y navaja se ponen a temblar y se llenan a sí mismas de grafittis líquidos de esos que os contaba.

El caso es que ayer había medio solete primaveral y el Gafapasta nos tenía callejeando a Tío Harley y a mí que si Peña Herbosa que si Lope de Vega abajo, y va y se tropieza con la Mari-Kim peligrosa esta y se ponen a despellejar a unas y a cortar trajes a otros con una lengua que ya se la podían meter un rato en lejía, que hasta yo con toda mi chunguez estaba escandalizada. Y para despellejar a gusto se sientan en una terracita al sol y se trincan unos orujos disfrazados de cafés con leche.

Yo esutve formalita y disimulona todo el rato, porque le había echado yo el ojo al bolso de la peligrosa y estaba repasando la estrategia para atacar al descuido. Así estaba yo, al quite, cuando el Gafapasta se metió al baño para tener una charla con sus problemas de próstata y luego salió para pagar las cop... los cafés, y nos dejó a Tío Harley y a mí al cuidado de Mari-Kim. Os juro que a mí me pone de los nervios esa manía del Gafapasta, que me siento abandonada y desolada y me pongo a aullar temazos de Camela a todo pulmón "Por qué me has abandonadoauuuuuuuuu si yo te quieraaaauuuuu", hasta que todo el mundo se pone de los nervios, el Gafapasta de las vergüenzas y salimos por patas a la sueca. También el veijuno se estresa, que se ve otra vez en la perrera tenebrosa, y se sienta y se levanta y se levanta y se sienta y se altera porque no tiene a pata ni hierbas ni pastillas. Pero al final el Gafapasta siempre vuelve y yo me pongo zalamera y contenta y Tío Harley tocho tochuno.

Pero esta vez era todo estrategia porque .... cuando la terrorista norcoreana le pasa las correas al Gafapasta ladro yo y le digo "Vega, todos a correr, que está hecho". Y pego un tirón a la correa y con la correa me llevo el bolso de Mari-Kim que había ido anudando con tino y disimulo a la correa con la disculpa de los nervios por la ausencia del Gafapasta y por las exigencias coreográficas del Top Hits de Camela.

Todo perfecto. Todo menos el Gafapasta, que es también un poco tocineta coreana y se quedó parado. Todo menos el Tío Harley, que se había sentado y me miraba con su característica expresión de "¿A ver guapina me lo puedes repetir todo y hacerme un esquema, que no lo acabo de entender?". Todo menos la Kim esa partiéndose el cuadro y diciendo "Ay qué tonta, si se me enredó el bolso en la correa de la poligonera". Vamos, que todo todito todo.

Que quede claro que yo hice mi trabajo estupendamente y que ya tengo mi primer bolso al descuido para sacarme el carnet de poligonera chungo cani de la muerte peligrosa. Y que he presumido de malota por el instituto para que todos se mueran de envidia y de rabia y de moquillo.

Está claro que tengo que cambiar de banda, porque estos dos son un par de lilas y no sirven para nada. Así que me he puesto a estudiar a las grandes criminalas como Ma Baker para empaparme de maldad carcelaria.

# cosasquemolan : los delitos contra la propiedad y moverte chunga por los pasillos del insti cantando la de Boney M esa de Ma Ma Ma Ma Maaa Bakerrrr.

# cosasquenomolan : esta banda de tarados que no valen ni para gangsters ni para hipsters ni para nada, coño ya.

martes, 2 de abril de 2013

IDENTIDADES LÍQUIDAS



El Gafapasta, que es un petardo de tres pares de eso, se pasa la vida hablando de la modernidad líquida y las identidades líquidas y no sé cuántas cosas líquidas más desde que el verano pasado conoció a un señor muy mayor y muy polaco que se apellidaba Bauman y se llamaba Ziegmunt, que hay que ser un rato raro y retorcido.

Pero está equivocado del todo, porque las identidades líquidas, pero líquidas de verdad, son las de los perrines. Porque los perrines lindos no somos como los humanos, que van poniendo de monumento en monumento Maripili estuvo aquí , como si a alguien le importara algo, o Juanki quiere a Susi , pero me parece a mí que la Susi ni caso y que lo mismo el Juanki debería fijarse en los ojines que le hace Manolín , o cochinadas y marranadas y tacos feos feosos. Y lo llaman graffitti como si por hablar en raro fuera más guay y les diera menos rabia al Pavisoso y a los demás alcaldes del mundo.

Eso, que no, que a los perrines, y a los chungos de polígono más, también nos gusta ir por ahí dejando la firma, y firmamos por las calles echando un poquito de pis perfumado para que todo cánido que pase se dé cuenta de la firma. Los humanos no, los humanos no se enteran porque no tienen nada de olfato, y si no basta con fijarse en los hologramas a los que votan. Así que un perrín, o una perrina, mismamente yo, pasea por el parque y olisquea y pasa revista a todas las visitas del día, y sabe si estaban de buen humor o de morros. Y si te caen mal, echas tu firma encima para que nadie se acuerde de ellos.

Además, cada perro tiene su perfume particular. Mami Glenda echaba una firma con olor a Chanel Nº5 que daba gusto. Yo firmo con un pachulí de los más hippy. Y Tío Harley huele a viejuno y deja peste a Brummel o a Tabac o a algo parecido.

Pues eso, que tan contenta que voy yo echando graffittis líquidos de esos por la calle para que todo el mundo sepa que La Gin Estuvo Aquí Y Bien Chula Y Guapa Y De Todo y ahora llega el viejuno del Harley y saca la vena machista y dice que él es el mayor de la familia y que no va a consentir que su sobrina favorita (y única) vaya dejando firmas por la calle para que las olisqueen todos los chuchejos que quieran, que eso es de pelandrusca va y me dice, así que cada vez que echo unas gotitas para llamar la atención, se acerca el viejo y churra encima como si fuera una vaca-manguera. Y ya no hay quien huela a nada que no sea colonia de viejales en tres kilómetros a la redonda.

El otro día le eché la bronca y le tiré un muerdo chungo a la bocaza, porque como siga así luego el Dallas Dalletas no me va a encontrar cuando venga a buscarme para salir de botellón y eso sí que no, que el Dallas de cualquiera no tiene nada y yo de pelandrusca menos, faltaba más. Y le he dejado claro clarinete que como se pase un pueblo más con sus firmas y sus pises y sus leches sexistas le corto lo poco que le dejó la veterinaria cuando le metió la tijera en las mismísimas partes, y que a ver cómo firma.

#Cosasquemolan : Borrar el rastro de bichonas maltesas pijas como Betty y otras rancias.

#Cosasquenomolan : Que Tío Harley te borre los rastros y confunda a tu novio.