martes, 10 de noviembre de 2015

NOCHE DE HALLOWAW


Anabotella, la gata mala, nos dijo que era una ordinariez anglosajona eso de disfrazarse para aterrorizar al vecindario y cosechar chuches. En cuanto dijo "ordinariez anglosajona" supe que la muy bruja había estado invocando a MamiGlenda porque eso era mucho de glamour francés. Pero le dije que mira qué bien, que resulta que Gelo y yo éramos y somos anglosajones a mucha honra y que nos íbamos a divertir mientras ella se aburría tricotando tapetes y viendo alguna chorrada en la tele.

El Gafapasta no puso mala cara pero dijo que cuidado con las chuches, que éramos un poco adictos y el Gelo un verdadero yonki.

-Ayayayayayayayaya yonkichuche yonkichuche ayayayayayayay

Pero el caso es que nos dijo que si nos portábamos bien y cuidábamos de la tonta de Tiberio que nos daba permiso. Y fue una noche súpermegadivertida.

El Gelo se disfrazó de adolescente botellonero rompecristales de los que tanto abundan por el barrio. Llevaba pantalones a medio tobillo y a medio culo y gorra absurda al revés y cuando le abrían la puerta ladraba ¡AYAYAYAYAYAY TRUCO O TRATO! y entonces tiraba una botella contra el suelo y lo dejaba lleno de cristales y luego vomitaba encima. De pánico.

Yo elegí de disfraz el de vecina neuro-psico-histericotillona con miedo a los perros. Me escondía detrás de un coche y cuando pasaba gente con perrines salía como loca gritando ¡AY DIOS MÍO AY DIOS MÍO QUE ME MUERDE QUE ME MUERDE! La gente se asustaba mucho, pero a los perros casi les daba un parrús que es lo que me pasa a mí cuando me encuentro a la que me sirvió de modelo. Un espanto.

Lo más divertido lo de la gata tonta. A Tiberio la convencimos para que se disfrazara de Mariano Rajoy, que iba a triunfar de casa en casa. Así que cuando le abrían la puerta gritaba ¡MARRAMAMIAUUUU TRUCO O TRATO INSHIDIASH RECORTESH MASH INSHIDIASH! Al principio los vecinos se asustaban pero en vez de golochuches lo que recogió la Tiberio fue escobazos en el culo y sartenazos en el hocico. 

#cosasquemolan : los seis kilos de golochuches que nos trajinamos entre el Gelo y yo mientras Tiberio se tomaba un trankimazin.

#cosasquenomolan : los tapetes cursis que nos encontramos por toda la casa cuando volvimos. El aburrimiento de Anabotella y su gusto estético, eso sí que da miedo pero miedo miedo.

martes, 13 de octubre de 2015

DESBORDAMIENTOS DE EGO A TUTIPLÉN


Ya le tengo dicho al Gafapasta que me da igual lo que diga y lo que ladre para bajarme los humos, al Setter Moñas que intente aturdirme con sus ayayayayayays lacrimógenos, a la gata mala sus inshidiash y a la tonta su reducción al absurdo: Estoy que me salgo. Verdad verdadera. 

Os voy a contar la semana que llevo y luego me decís si no es para que el ego se me desborde a la vez por los dos lados de la cama. El Gafapasta, con eso de que anda de novedades laborales, le esta pillando gusto a lo de viajar y mandarnos a los perrines de pensión. Hay que reconocer que nos ha buscado una patrona que nos tiene súper cuidados y requetesúper atendidos, aunque yo al Gafapasta siempre le hago mohínes de desagrado cuando me pregunta con tonito de culpabilidad y mala conciencia "¿Qué tal?", y con la cara que le pongo le va a entrar el bajonazo, que bien merecido se lo tiene por no llevarme de paseo por el Retiro y de juerga por Lavaréis. El caso es que Em Yei, la Patrona, cuando nos llevó de vuelta a casa le dijo al jefe. "Es muy cariñoso el chico, pero un poco tonto, la que es inteligente pero bien que inteligente es Gin". 

- Y linda, perrinalinda. 

- Eso, muy inteligente y muy bonita.

- ¿Perrinalinda rabilista entonces?

- Lo que tú quieras mi amor.

Y me fui meneando el culamen hasta el  Gafapasta chuleándome para que le quedara claro que la Patrona sí que me entendía. 

- A ver, Gafapasta, ¿lo pillas? yo perrinalinda y perrinalista y este de aquí con la baba colgando tonto del cogote. 

- Ayayayayayayay yo tonto del cogote, del cogote, ayayayayayayayay.

Le sentó fatal, pero yo tengo que hacerme valer. Y hoy he vuelto a engordar cien gramos de puro placer, ya veréis cuando me vea la bruja de la bata blanca y me quiera poner a régimen de pienso sin calorías. 

Pero no queda ahí la cosa, que resulta que tengo una lectora fan. Me ha dicho el Gafapasta que hoy se le han acercado para decirle que en unos momentos difíciles que no le permiten concentrarse en la lectura, su escritora favorita soy yo, que soy la única que la ayuda a sonreír y a disfrutar de las letras.

-Menudo piropo te han echado, perrinalinda.

-Ya te digo, ¿me propones tú para el Premio Nobel o me propongo yo directamente?

-¿No se te estará subiendo todo esto un poco a la cabeza?

-Mejor a la cabeza que a la barriga, gordinflón.

-Qué borde eres hija.

-Ayayayayayayayay borde borde borde.

-No tengo yo por qué aguantar esto, que soy una gran literata. Me voy a mi cuarto.

-Querrás decir a mi cuarto.

-Caraculo

-Petarda.

Y así estuvimos un buen rato hasta que se aburrió muchísimo, me llamó descarada, y se fue a prepararme la cena rica rica rica. Me encanta sacarle de quicio.

#Cosasquemolan : Las lectoras que saben apreciar la literatura de verdad.

#Cosasquenomolan : ¿A qué porras están esperando los del comité del Nobel? ¿A que se me aje el chirimiri?

jueves, 3 de septiembre de 2015

LA PRENORMALIDAD VIEJUNERA DE LA GATA TONTA



Pues sí, señores y señoras, yo las vacaciones me las tomo muy a pecho y estoy súper ocupada yendo a la playa de Mataleñas, a las ferias y a la feria de las naciones como toda poligonera que se precie, así que no tengo tiempo para escribir. A lo mejor ahora que vuelvo os cuento alguna hazaña de verano.

Hoy le toca el turno a Tiberio, la gata tonta. Las dos micifuzas se nos están haciendo viejunas, que ya peinan 14 añitos de conspiración y estupidez según se trate de la mala o de la tonta. El caso es que desde hace unos meses vengo observando yo, que soy perrinalinda pero atenta, que la tonta es un poco menos tonta, y no sé si me gustan los efectos secundarios.

A ver que os explico. La gata tonta es asocial por descuido de la naturaleza, especialita ella, así que siempre anda lejos de la manada con ese maullido desagradable que tiene. Pues ahora, con los años, ha decidido que está mucho más calentita y cómoda usándome a mí de colchón para dormir. Ha decidido también que ella y yo somos súper amigas y siempre tiene ganas de jugar cuando estoy yo en los brazos de Morfeo y me despierta con su voz estropajosa y sus delicadas uñas, así que yo me enfado y salgo corriendo detrás de ella diciendo quita cerda, que me dejes dormir, y ella me hace burla y dice "cerda no, yo gatina linda miaggggghhhhh". Mal.

Para sumar horror al pavor, la dieta de la gata tonta era exclusivamente de pienso gatuno, por muy rico que fuera lo que el Gafapasta tuviera para comer, ella como si tal cosa mientras el Moñas, la Mala y yo (y Mamiglenda y el Motero en sus épicos tiempos) nos sentamos al lado del jefe esperando algún recorte. Hasta fabada come la mala, Anabotella. Pero Tiberio no, Tiberio mira con cara de asco, dice miaggggggghhhhh y se larga corriendo. O se largaba, porque ahora se acerca, olisquea y ha descubierto que le gustan el jamón de york, el bonito del norte, la pechuga de pavo, el pollo y los quesos de La Jarradilla. Más para repartir, menos para mis lindos colmillos. Mal. 

Además, también ahora es otra más para reparto de mimos. Hasta hace poco el Gafapasta podía atraparla por sorpresa y a duras penas obligarle a tragar la medicación. Ahora no, ahora si el Gafapasta se sienta y usa una mano para hacerme mimos a mí, otra para hacer mimos a Gelomoñas y y otra para hacer mimos a Anabotella, la tonta se acerca y dice "para miau también miaaaggghhhhhhh" y el Gafapasta tiene que encontrar una cuarta mano para acariciar el cogote de la tonta. Así que claro, con tantas manos el Gafapasta se estresa y nos manda a todos a la mierda, con lo fácil que sería mandar a la mierda a la tonta, a la mala y al moñas y atender las necesidades afectivas de las perrinas lindas nada más.

Resumen, que la gata tontavieja ocupa espacio, pesa, araña, come chuches, absorbe mimos y dice miaaaggghhhh. Casi la prefiero de tontaasecas.

#cosasquemolan : Los mimos del Gafapasta y la pechuga de pavo.
#cosasquenomolan : La viejunez de la Tiberio y los miaaagggghhhh que va gritando.

miércoles, 5 de agosto de 2015

MI TESOORRROOOOOOOOO

El Gafapasta tiene entre un sinfín de taras mentales un singular padecimiento, la ciclotimia chucheril. Lo mismo te tiene las golochuches en cartilla de racionamiento que viene cargado de las más exquisitas como si hubiera amanecido en Navidad de repente. 

El verano le ha dado con el modo gologeneroso on, así que ha estado repartiendo codillos de cochino marrano para Gelo y para mí, que son como muy ricos y muy entretenidos, hasta que solo quedó un pedazo con poca carne, poco tocino, bastante hueso y un pellejo de cerdo duro e imposible de morder, o sea, súper divertido para estar royendo horas y horas, que yo por un final de codillo MA - TO.

Mato literalmente, porque no sé si sabéis que soy perrinalinda pero poligonera, jenny y macarra como la que más. Un poco la Esteban en Setter y con cerebro. Y con mucha iniciativa, por ejemplo, va el Gafapasta y le da el final del codillo al de en medio de Los Pecos, el Setter Moñas. 

- Ayayayayayayayayay golochuche, golochuche ayayayayayayayay.

-Francamente, Gelo, me encanta tu nivel de conversación, tronco.

- Ayayayayayayayay que se me cae la baba y se me cae el codillo ayayayayayayayay.

Es fácil poner a Gelomoñas en estado de nerviosismo histérico. En cuanto se le cae el codillo, pego un ágil-grácil brinco, me apropio del codillo, salgo por patas a toda velocidad y organizo como de costumbre fortaleza en mi cama. Vale, el Gafapasta dice que es la suya, pero vosotros y yo sabemos la cruda realidad. Se acerca la gata mala para sestear al sol, le tiro un viaje de colmillo a la punta del bigote mientras digo muuuuuuy gruñona y enfadada "Desaparece, minina petarda, mi codillo, mi tesoro, mi regalo de cumpleaños, gollum gollum". La minina, que es mala pero parcialmente sensata dice miaaaaaaauuuuuuuu y desaparece. No tarda en aparecer el moñas que dice

- Ayayayayayayay mi golo ayayayayayayay

- Grrrrrrrrrrrrrrrrrr essssssssss míoooooooo gollum gollum

Le muerdo la oreja, el hocico y el alma. Lloriquea pero se marcha a un rincón, desolado. Regresa cada diez minutos a por su golo, el muy sinvergüenza, negándose a reconocer que es mi tesorooooo, gollum gollum, mientras los colmillos se me afilan, la pelambre se me convierte en escamas verdosas y llevo de acá para allá y de allá para acá el codillo, buscando un escondite seguro. Pero como no hay manera de esconder nada en condiciones en esta casa de tócame Roque decido montar guardia junto a la golo durante horas, días y a día de hoy semana y media. Se me están atrofiando las patas pero qué voy a hacer, si en cuanto parpadeo aparece Gelo por si cuela y tengo que pegarle otro ñisco.

Al menos, el Gafapasta no come huesos de codillo y la gata tonta solo mira, porque es el único ser en la tribu que entre un plato de pienso y un filete de solomillo elige el pienso, ella, tan especial, la pobre.

jueves, 16 de julio de 2015

COMO EL ROSARIO DE LA AURORA



El Gafapasta tiene muchos decires y cantares absurdos, como para ir así de intelectualoide con deje popular. Por ejemplo, cuando me pongo a jugar a lo bruto con las gatas nos dice que nos controlemos, que vamos a acabar como el rosario de la aurora. 

- Oye, Gafapasta, y que es eso de la aurora.

- Pues como amanecer más o menos.

- ¿Y por qué Rosario estaba en la calle al amanecer? ¿Era pelandrusca? 

-No, a ver, que el rosario es una oración que se dedica a la virgen. 

- O sea, que la virgen sale de paseo al amanecer y le rezan. ¿Qué virgen?

- La del Carmen.

- ¿La vecina que va siempre de marrón? 

-Esa.

Ya sabéis que yo soy inglesa y anglicana (Mamiglenda decía "anglicanorra" porque siempre me llamaba cosas bonitas) y enseguida todo esto me ha olido a procesión, y a mí me dan miedo las procesiones. Pero tampoco me parece bien que Maricarmen se pase el día encerrada y está bien que salga de paseo de vez en cuando. 

- ¿Podemos ir, podemos ir?

- Pero a ti te dan miedo las procesiones.

- Pero entonces ¿es un rosario o es una procesión?

Empieza a mirarme con cara de odio, la tarde promete. 

-Las dos cosas.

-Bueno, pues mañana por la tarde vamos y llevamos a Gelo.

- No puedes ir por la tarde, es al amanecer.

-¿Y no hacen otro pase? Es que al amanecer estoy dormida.

- Pero es que si hicieran otro pase no sería rosario de la aurora.

-Ya, pero ¿y si no me despierto?

-No te preocupes, te despiertas seguro, cari.

-¿Tú has ido alguna vez, Gafapasta?

-Claro, de peque. 

-Entonces tú sabes cómo termina ¿no? 

- Con chocolate con churros en Áliva.

-O sea, ¿que si me peleo con las gatas nos llevas a merendar?

- Justo en eso estaba yo pensando.

- Cretino.

- Cerda.

-Yo cerda no, yo perrinalinda.

Y me voy muy contenta a la cama después de cabrear al jefe, pero es que tengo muchas cosas que preguntar porque las únicas preguntas tontas son las que no se hacen (Gelo nunca pregunta) y además si no investigo cómo voy a prosperar. Me tumbo, ronco y trato de soñar con los angelitos, pero no puedo porque cuando estoy a punto se escuchan muchas voces absolutamente desafinadas gritando "Veeeeeen con nosotros al caminar, Santa María veeeeeeeen". No acabo de decidir si son ovejas balando, pero esas dicen beeeeeeee y no veeeeeeeen, o si es el fantasma de Glenda llamándome, pero Mami no me llamaría María, me llamaría "poligonera idiota". Las voces desafinadas siguen cantando "Saaaaanta, santa María madre de Diossssss". El ruido es tan horrible que entro en pánico, me despierto y me pongo a ladrar desesperada contra los cielos. El Gafapasta se despierta y gruñe; Gelo se despierta y dice ayayayayayayay; las gatas roncan. Yo ladro a todas las ventanas a la vez asustadísima mientras los cánticos diabólicos continúan. El Gafapasta me manda callar, yo ladro, el Gafapasta se levanta de la cama, intenta perseguirme, se tropieza con la cama y se da con la nariz en el suelo. Sigo ladrando. El Gafapasta me persigue descalzo pisando trozos de hueso punzante estratégicamente olvidados por el pasillo. Aúllo y ladro. Me atrapa el Gafapasta y me cierra la boca, gimo y gruño, gruño y gimo. Las voces ululan "ruega por nosooooootros, por nosotros pecadoresssss".  Intento recordar cuándo he sido tan malo como para que me envíen la octava plaga de Egipto en forma de música popular gritada. Las voces diabólicas terminan, yo me callo, el Gafapasta me suelta el hocico, vuelvo a ladrar, me mira fatal pero dice que ya pasa y trata de volver a dormir. Le chupo la boca un rato y cuando ya no puede más de asco le pregunto

-¿Y el chocolate con churros?

Esquivo el puñetazo y me voy a un rincón pensando que el Gafapasta es un malqueda, que no cumple las tradiciones y que quiero un rosario de la aurora que termine como Dios manda y la vecina Carmina se merece. 

lunes, 29 de junio de 2015

ANA BOTELLA JUEGA A LAS ALTURITAS



Anabotella, la gata mala, lo está pasando mal, pobre. Ya os conté que con tanta conspiración, tanta intriga y tanta perversidad estaba perdiendo la cabeza, que tras escuchar en las noticias que su homónima la de Ánsar era alcaldesa de Madrid comenzó a pasear pasillo arriba pasillo abajo con vara de mando en los colmillos, rabo enhiesto y bigote retador diciendo "Soy la alcaldesa". Lo mismo se pensaba que Madrid era el nombre en clave del cuchitril este en el que el Gafapasta tiene organizado el zoo.

Para evitar un trauma a la malvada minina, el Gafapasta escondió los aparatos de radio, las televisiones, los accesos a internet y los periódicos, para que no leyera que Ana Botella dejaba la alcaldía y tuviéramos que renunciar a las golochuches para pagar un pastizal a un psicólogo gatuno. Pero las vecinas, majas ellas, se comunican a griterío rampante y hace dos días que se escuchó hasta en Calatayud "MARIIIIIIIII, QUE HAS VISTO QUE LA BOTELLA SE QUEDÓ SIN ALCALDÍA Y TIENE TODO EL TIEMPO DEL MUNDO PARA CONTAR MANZANAS Y PERAS Y HACER MACEDONIAAAAAAAAAAA".

La gata petó y empezó a refunfuñar que ella se merece lo más alto, que tiene que ser como poco archienemiga de alguien, bufó a Gelo, arañó a la gata tonta, se me acercó pero pude controlar el ataque diciéndole bajito "Te rajo, micifuza, como te acerques te rajo", mató dos moscas y en medio de un remolino de ira nadie sabe cómo la vimos de pronto encima del ropero . Eso significa o que conserva unas buenas patas para saltar a pesar de los años que ya va cumpliendo o que es verdad lo que dice el Gafapasta de que esconde libros de brujería con nombres espeluznantes como Necronomicón y cosas así y que la Inquisición debería hacer algo. Porque no había forma humana ni gatuna de llegar a la cima del armario. Ni de bajar.

Que eso sí que fue una fiesta. Al cabo de un rato paseando por las cumbres, se le pasó el berrinche y quiso bajar a por un poco de pienso y a ronronear al Gafapasta en plan aquínohapasadonada rrrrrrr rrrrrr . Vértice derecho, gata asomada, huy qué miedo y qué alto, camino hasta el vértice izquierdo, gata asomada, huy qué miedo y qué alto, viraje al centro, gata asomada casi colgada del centro del armario, huy qué alto y qué miedo. Abajo Gelo "ayayayayayayay qué alto ayayayayayayayay", Tiberio la tonta preguntándose "¿Es un gato? ¿Es un avión?", Perrinalinda "Será tolai y absurda" y el Gafapasta partiéndose el cuadro y de camino a la cocina "Cuando termine de hacer la comida si no ha encontrado cómo bajar habrá que ayudarla".

A media fritanga dejó de ser necesario el plan de rescate, porque esta bicharraca por una patata frita se tira desde el Aconcagua sin mirar. Por la cocina la dejamos medio mareada, con el bigote vendado y una tirita en el ego musitando "Soy importante, soy alcaldesa, me merezco lo más alto, matad a Supermán". 

En fin, Gatas. Puff.

jueves, 25 de junio de 2015

LA EDUCACIÓN Y EL TINTE



Seré todo lo poligonera y bandarra que queráis, y me encanto cuando me pongo chunga de verdad. Pero con los humanos y humanoides tengo cierta capacidad de autocontrol que resulta muy práctica cuando no llevo el listerine en el chándal y no puedo arriesgarme a morder cualquier cosa. De paso, le ahorro problemas al Gafapasta. Pero os juro que ayer estuve a punto a puntito de clavarle los colmillos en el corvejón a una absurda maleducada que iba de guay y que así de pronto, porque tenía momento L'Oreal y estaba de subidón imposible (ni guapa, ni lista, ni fina, ni estilos ... pero ¿de qué presumes malbicho?), decidió darme un Zas en todo el hocico.

Que estábamos Gelo y yo paseando al Gafapasta y entrenádole los estiramientos de brazo (hemos apostado que si no es por la Pascua será por la Trinidad que los brazos se le pongan en modo gorila, a la altura del tobillo y por ende del betún) cuando nos encontramos con la Rubia Farmatint. Parece que era amiga del Gafapasta ("Conocida, Gin, como mucho conocida" se disculpa el jefe) y viene gritando como descosida "Qué guapoooooooooooos". 

Yo empecé a mover la cola como perrina linda y bien educada. Porque había usado plural con masculino no marcado y por tanto incluyente que dicen los académicos rancios y allí solo estábamos los tres, Gafapasta, El de en medio de Los Pecos y yo y lo de guapo por el Gafapasta no va a ser, digo yo. Porque iba con su marido digo, no por otra cosa, que sois muy malos vosotros también (ejem).

Así que todos contentos cuando llega La Farmatint y dice: Bueno, guapos no, guapo éste (y da palmaditas en el cogote de Gelo que entusiasmado corrobora "ayayayayayayayay guapo éste, ayayayayayayay") porque la otra , la pobre, bueno, eso ...

¿Será jodía la medio Cospedal de los hocicos? ¿Pues no va y me dice "la otra" , "la pobre" y "bueno eso" como si tuviera yo garrapatas purulentas en el chirimiri? Pobre seré, pero honrada y sobre todo perrinalinda. Que sé yo que toda esa babosada la escupió para llamarme feúcha.

Si algo tiene todo el mundo claro es que el Gafapasta es gafapasta, el de en medio de Los Pecos es cantante melódico cursi y yo soy PERRINA LINDA. LINDA. Coño ya.

Pero si aquí nos vamos a poner todas sinceras voy a hacerte un retrato robot para que te localicen mis fans y te escupan, so intriganta. A ver, vestías fatal, de baratillo imitación a pijo-con-pretensiones-pero-ni-a-eso-llego, llevabas un marido de esos que pillas cuando solo quedan restos en la pandilla y sobre todo estabas teñida con Farmatint Rubio Sobaco número tres caducado. Un horror de pelo, tía, como para que vengas hablando de los demás, que tengo yo un pelaje lemon belton natural que lo flipas de reluciente y de suave. Y esos pelajos significan que además comes pienso del malo, o chopped de pienso o algo peor.

Al Gafapasta ya se lo he dejado claro: una y no más. Como me la vuelva a encontrar dejo de decir GAUOHHMMMMMMMM y me la meriendo en crudo. Si luego se arruina curándome infecciones en la veterinaria peor para él por tener esas amistades asquerosas ("te he dicho que conocida, guapa").

Y ahora voy a terminar de escribir y a morder a Gelo, que lleva toda la mañana dando volteretas por el pasillo diciendo "Ayayayayayayay la pobre ayayayayayayay". Este absurdo no ve el peligro.

martes, 16 de junio de 2015

PERRINABEITIA EN APUROS


Me parece a mí que el tiempo es un capullo hasta para las perrinalindas poligoneras cargadas de energía y de pizpireto encanto. Y no me gusta nada de nada de nada.

El caso es que cuando el Gafapasta decreta salida al parque el Gelo sale atacadísimo ("ayayayayayayay al parque al parque ayayayayayayay") y me pega a mí todo el nerviosismo y he tomado por costumbre celebrar el paseo con un ataque histérico en plan explosión de energía: cojo carrerilla, doy un salto por encima de una tapia, paso a la zona de césped, doy por allí dos carreras locas y vuelvo. Es como un ritual, algo así como "saltando vienen con alegría".

El otro día sale Gelo atacao ("ayayayayayay") y yo detrás atacá y lista para mis cosas: preparo la carrera con estilizo olímpico, bato patas, tomo altura y ... y me quedo atascada con la barriga sobre la mitad de la tapia, las patas delanteras colgando por delante, las patas traseras colgando por detrás, el cuerpo oscilando cual péndulo de Foucault y el Gafapasta partiéndose el cuadro de risa a carcajadas "¡Gin, que ya no estás para trotes, viejuna!" , con el de en medio de los Pecos coreando "ayayayayay viejuna ayayayayayay".

Oye, que un sufrimiento, que no iba ni para un lado ni para el otro y que allí reírse se reían mucho todos pero ayudar ninguno. Hasta que al final conseguí subir el culamen y el patero de atrás y sacudirme el polvo y la vergüenza. 

- Qué gracioso, Gafapasta, podrás tu hablar de culos que no saltan y de veneras, hombre ya.

- Todo lo que quieras, mona, pero te has trabado.

- No soy mona, soy perrinalinda. Y no me he trabado. Me resbalé al saltar, y calculé mal la carrera y había un chicle y una paloma me desconcentró y ....

- Ayayayayayayayay un chicle ayayayayayayay

-Tú te callas, cretino.

Y me fui toda digna al parque, y al día siguiente salté estupendamente y batí dos récords del mundo con un solo salto, y al siguiente volví a saltar y al siguiente otra vez. Pero el Gafapasta siempre como La Piojosa. "Ten cuidado, que ya no estás para saltos".

Para una vez que mato un perro...

miércoles, 20 de mayo de 2015

CONFLICTO DIPLOMÁTICO: CHINAS NO, GRACIAS


La peña se queda con que yo soy perrinalinda y simpaticorra y se olvida de mi lado chungo con demasiada frecuencia. 

Los chinos, por ejemplo, se creen que como bañan a sus perros en salsa agridulce y los hacen chuletillas pues me van a dar miedo. Pues no, que no me dan nada de miedo ellos ni esos perros raros que nos envían para invadirnos. Los unos, con las lenguas azules, los otros enanos peludos con lacio, los otros arrugados con hocico chato-gatuno. 

Los peores, los arrugados. Y peores que los arrugados, las arrugadas. Por mi parque favorito bajan dos tipas shar-pei que van de guays y como en plan pandilleras, con cazadoras donde pone "La China me fascina". Yo las llamo la Fu-Man-Chú y la Ko-La-Kao, me parecen antipáticas y petardas y me ladran muchísimo diciéndome cosas horribles pero en chino mandarín para que no las entienda.

Yo no he hecho nada, eh, que conste, que me tiene el Gafapasta muy aleccionada para ser pasablemente educada y respetuosa con los derechos caninos y saco muy buenas notas en Educación para la Perronía. Pero son unas busconas indecentes y unas marigrescas. Una tarde se acerca el Gafapasta a las chinorras esas para presentárnoslas y yo muy amablamente digo

- ¿Tas Lim Piao?

Y Gelo:

-Ayayayayaya, están arrugadas, ayayayayayay

Pero todo con muy buena intención. Que no es para ponerse como se pusieron que mi chino sea defectuoso y El de En medio de Los Pecos sea un poco tordo y un mucho alterado psicótico.  Pues nada, allá que empiezan a sacar colmillo y a ladrar y a comportarse con un comportamiento que no era propio ni de señoritas ni de pandilleras. Así que yo contesté, claro, pero en inglés barriobajero y le tiré un amago de mordisco a la Fu-Man-Chú y ella intentó morderme a mí y el Gelo vino a defenderme y la Ko-La-Kao se erizó y se armó la malimolena.

Me ha reñido el Gafapasta, me ha dicho que aunque sean chinas ellas también son hijas de Anubis y que la arruga es bella. Y yo le he prometido ser respetuosa con todos los chinos menos con los arrugados. Así que ahora saludo un poco seca a un Shar Pei chiquitinurcio que para ser oriental es hasta simpático y olisqueo con cierta donosura a un Chow Chow de esos con lengua azul mientras le digo a Gelo por lo bajinis a Gelo "Ataca, Gelo, ataca" y el cantante melódico se pasa al rock duro y le gruñe muchísimo.

Pero cuando veo a las arrugadas antipáticas amarillentas esas les grito desde la distancia "Eh, Fu-Man-Chú, Free Tibet, tía, Free Tibet!!!" Y ella se pone toda dictatorial y la liamos parda. Unas ganas de morderla que tengo...

martes, 28 de abril de 2015

PERRINALINDA PIDE AYUDA PARA SOS SETTER


Aunque sea un poco rubia, un mucho macarra y un totalmente perrinalinda, no me olvido de esos chicos y chicas tan majos que el Gafapasta llama "las hadas de Sos Setter". 

A mí me abandonaron cuando era una cachorrona. Yo creo que por eso antes tenía un poco de miedo a los coches. Y también abandonaron a Tío Harley cuando era viejuno porque pensarían que no servía para nada y al moñas de Gelo. A veces parece que la gente no lo sabe o peor, que no le importa, pero cuando te abandonan y te estás mucho tiempo en las jaulas de las perreras, te llevan a un sitio donde te dan una inyección para que te mueras y dejes de molestar.

Me imagino a veces qué me hubiera pasado a mí si no me hubieran sacado de la perrera Sonia y Berto, no hubiera conocido a Mami Glenda, ni al Gafapasta, ni la comidita rica y los mimos, ni el parque, ni la playa, ni la vida guapa guapa que he tenido estos años, sería como si ni siquiera hubiera existido. Y entonces me da como vértigo, me pongo muy triste muy triste y por la noche tengo pesadillas.

Pero SOS SETTER existe, y también otras asociaciones de gente buena que nos ayuda a los perrines y gatines y hasta caballos y hurones que tenemos mala suerte con nuestras primeras familias humanas, que nos salvan de la perrera, nos ayudan a recuperar la salud y nos buscan una casa de verdad. Para mí Sos Setter es la mejor del mundo mundial y a la que más quiero de todas, porque yo soy muy agradecida. Que ya le dije a Gelo lo primero de todo en cuanto llegó "a ver, so moñas, que aquí estamos bien y no nos hace falta más, así que la paga que te dará el Gafapasta para tus golochuches la juntas con la mía y se la pasamos a Las Hadas sossetteras para que sigan salvando vidas y buscando familias a perrines tan preciosos como el de la foto, que se llama Jefferson Airplane y que no ha tenido suerte y lleva ya dos años esperando su oportunidad, con lo marchoso y lo lindo y lo supermajísimo que es.

Jefferson es hoy el veterano de Sos Setter, el que lleva más tiempo esperando familia. Y está muy preocupado porque allí hay muchos gastos de comida, de veterinarios, de desplazamientos, de medicinas y está todo carísimo y además el bichomalo de Montoro también cobra una barbaridad de IVA a las protectoras por hacer el trabajo que tendría que hacer él con su aspecto de cabra grande y su voz gallina borrachuza. Y claro, las cuentas no salen y las deudas suben y todos los perrines tienen miedo porque han oído que si todo sigue así Sos Setter va a tener que cerrar y qué van a hacer ellos sin Sos Setter y sin familia.

Así que si alguna vez os lo habéis pasado bien con mis historias y mis chifladuras, si alguna vez habéis pasado al lado de un perro que os ha mirado con ojos dulces como los de Jefferson y os ha hecho mimines, si en tu vida hubo un perro especial, hoy que me he puesto seria os voy a pedir un poco de ayuda para Sos Setter. Sí, ya sé que son tiempos malos y achuchados, y si de verdad no puedes ayudar aunque quieras no te preocupes que yo te voy a seguir queriendo lo mismo y no quiero ni que me lo digas. Pero también sé que a ti tal vez no te resulte un esfuerzo tan grande ayudar a Sos Setter para que siga salvando vidas como la mía, no sé, con 10000 o 100000 euros. Ups, creo que no controlo las matemáticas todavía que me acaba de decir el Gafapasta "Pero a dónde vas, borrega". Yo le he dicho "A ver, tío listo, que me he confundido y que no soy borrega, que soy perrinalinda, porque las borregas hacen beeee y las perrinas hacen guau". Quería decir cinco euros o diez euros o lo que puedas. Como sé que me vas a hacer caso te voy a enviar un lametón virtual y cuando te vea te voy a lavar la cara y a llenártela de babas de puro agradecimiento. Y también te voy a dejar un enlace en el que te cuentan todas las formas que tienes para enviar un poquito de dinero a SOS SETTER que para ellos será mucho y para los perrines la vida.

Muchas Gruaucias, que os quiero tíos, jo.

http://www.sossetter.com/donativos/


miércoles, 22 de abril de 2015

TIBERIO'S BURNING CHICHI / EL CHICHI DE TIBERIO ESTÁ QUE ARDE



Tiberio, la gata tonta, es el único ser de la manada con la entrepata conectada. A ver, El de en medio de los Pecos y yo venimos de una protectora con sentido común, así que nuestros sistemas reproductivos fueron debidamente desactivados; la gata mala fue igualmente desactivada después de su mítico salto del tigre desde la ventana del quinto hasta un gang bang de gatos erectos y callejeros que la dejaron multipreñadísima. Por su parte, después del adiós del Chico Guapo, lo del Gafapasta ha caducado por falta de uso y exceso de telarañas.

El caso es que Tiberio nunca fue tan arrojada (y pelandrusca) como la Anabotella, así que el Gafapasta siempre pensó que no merecía la pena gastarse los euros en la desactivación sexual de quien previsiblemente iba a estar toda su vida tan cerca del sexo como de Nueva Zelanda. "Que obre Natura", proclamó entre irresponsable y sentencioso. Y nos condenó con esas tres palabras a una vida de horror cada cuatro o cinco meses.

Pues sí, esa Natura que tan tacaña fue con Tiberio en habilidades intelectuales, compensó con unas grandes aptitudes para el ardor gritón. O lo que es lo mismo, que a la minina le llegan las calenturas y comienza a desgañitarse por toda la casa y a resobarse contra puertas, peluches, libros, martillos, guitarras y sacos de patatas que encuentra a su paso. Hasta se resoba contra mí cuando me pilla dormida o despistada, la muy zoofílica.

El Gafapasta insiste en que tampoco se nota tanto. Porque la gata tonta cuando quiere comer dice MIAAAAA con un tono muy muy desagradable, cuando quiere estar aquí y allí al mismo tiempo dice MIAAAAA mientras se despelucha toda de puro estrés, cuando está contenta dice MIAAAAA y cuando está triste dice MIAAAAA. Cuando está calentorra simplemente cambia el chip y dice MIAAAAAAAAAAAAAAAMIAAAAAAAAAAAA MIAAAAAAMIAAAAAAA. Muy alto. Muy seguido. Muy desagradable.

Como se acercan las elecciones municipales y el Gafapasta me ha pedido el voto, le voy a exigir a cambio unos tapones para las orejotas, una terapia para que mi psique quede liberada del trauma de la gata absurda restregándose contra mis patitas de perrinalinda y el Quirófano Veterinario de la Señorita Pepis con bisturí y costurero para enfriar yo los ardores de esa micifuza, vaciar lo que haya que vaciar y, por si acaso, convertir sus cuerdas vocales en un mal recuerdo.


viernes, 27 de marzo de 2015

¡BANZAIIIIIIII!


A mí cuando se me pone la cara de loca del chirimiri me da una surada que la armo, vaya si la armo.

Yo creo que fue porque el Gafapasta había comentado a unos amigos la víspera "pues sí, la Gin está como mucho más formal y bastante obediente, más tranquila". Y me dio unas cogotadas cariñosas.

Lo mismo es que me dan rabia las cogotadas a desmano, o que ande por ahí contando mis intimidades, que si obedezco que si no obedezco. Así que ese alma libre que tengo y que va a poder conmigo decidió esperar su oportunidad.

Llega el Gafapasta al parque por la noche, entorna adecuadamente las potrillas de acceso a cuatro calles para controlar mis impulsos anarco-juerguistas, y se pone a esperar bajo la lluvia a que trotemos El de en medio de Los Pecos y yo, nos desfoguemos, y nos pongamos a su disposición un rato después. Pero una ventolada invernal, ah esa ventolada invernal, abrió uno de los laterales de par en par y ya se sabe lo que decía ese gran modelo de putones poligoneros que fue Mae West: la tentación se inventó para caer en ella.

Los ojos me hacen chiribitas como a Marujita Díaz, empiezo a salivar de la emoción y se me pringan las barbas como al mismísimo Rajoy de pura baba, y echo a correr ladrando ¡Banzai! como los kamikazes japoneses en busca de basuras comestibles, mininos y portaaviones norteameriyanquis.  No acabo de mordisquear la primera basura, ojear el primer gato y conseguir la plusmarca mundial de los 10.000 metros Prado San Roque cuando ya el Gafapasta ha puesto en marcha el operativo localización y neutralización de perra chiflada. Con la ayuda de Gelo, que es un esbirro colaboracionista y delator y le iba indicando al jefe mis movimientos.

Lo bueno de Gelo es que iba jadeando sus conocidos ayayayayays : "ayayayayayayaya por allí", "ayayayayayayay por acá", "ayayayayayayay por acullá" mientras yo cantaba "libre libre quiero ser, quiero ser quiero ser libre" y a ritmo de Los Chichos corría escaleras arriba, callejones a diestra, escaleras abajo. El Gafapasta acabó exhausto de correr detrás de mí y tratar de controlar al esbirro traidor a un mismo tiempo, así que me dio un respiro subiendo al Gelo a casa para que ladrara sus "ayayayayayay que la oigo, que la huelo, que me estresoooooo" desde la ventana y probar fortuna de manera autonóma.

Tenía yo la noche inspirada, las cosas como son, con unas velocidades estratosféricas por el Barrio del Carmelo, que me lo tengo bien trajinado, y sin caer en trampas. ¿Que venía el Gafapasta de frente? Frenazo en seco, un a que no me pillas para tocarle las narices y curva radical del derecho. ¿Que el Gafapasta sube las escaleras hacia esa curva donde siempre me acorrala? Un aguerrido "freeeeeeeee Nelson Mandelaaaaaaaa" y lanzamiento en plancha escaleras abajo. Además, como hacía tan malísimo pues no había gatos así que no aullaba histérica cada vez que veía uno y no daba pistas de localización.

A eso de las cuatro de la mañana, tras unas tres horas y media de juerga y cuando un macarrita simpático y guaperas que había sacado a la novia y a la perra de paseo se sumó al comando "Buscando a la Gin desesperadamente" decidí que tenía hambre, sueño y frío y pacté un encuentro amistoso debajo de la ventana de la Loli. Compuse mi cara de yo perrinalinda, yo perrinabuena, yo no fui Gafapasta, yo no fui, fue el maldito cariñena que se apoderó de mí. Y como el mi pobre estaba ya que no se lamía, puso su cara de culo más significativa pero no dijo nada. Dio las gracias al macarra colaboracionista y rumbo a casa.

La cena estaba riquísima, la cama blandísima y el sueño profundo y reparador. El careto del Gafapasta espectacular durante tres días. El mordisco que le arreé al Gelo por chivato, histórico. I Want To Break FREEEEEEEEEEEE, oh yeah.

jueves, 19 de febrero de 2015

LA ESPELEOLOGÍA Y YO


La cama del Gafapasta (eso se cree él) no sólo es estrecha, además es un poco paticorta. Así que entre ponte bien y estate quieta acaba por ser un artilugio de riesgo: lo mismo te caes que te trabas.

Pues sí, porque tenía ayer yo la noche flamenquita y ya estaba el jefe de retirada viendo capítulos viejos de The Big Bang Theory, el ñoño de Gelo roncando y moviendo culete para pillar postura y las gatas cual esfinges asirias como postes de esquinas (necesitamos otras dos gatas, Gafapasta, y así dices lo de cuatro esquinitas tiene mi cama, cuatro mininas me las desgarran) y resulta que ese duende gamberro que habita en mi cabecita loca dice "JUGUETEEEEEEEESSSSSSSS" y me voy a buscar por toda la casa pelotas, bichos descabezados, jabalíes de látex y hurones de chochiflex que gritan piiiiiii piiiiiii cuando los muerdes para tirárselos al Gafapasta a la cabeza (santo mazazo que le di con un Kong macizo en mitad de la vista, el día menos pensado me le lesiono) y que el Gafapasta se diera por aludido y los tirara para que yo fuera por ellos y otra vez a empezar y todo megadíver. 

El caso es que un pulpo de colorines que en ese momento llamaba mucho muchísimo mi atención se cayó por debajo de la cama. Ni rauda ni perezosa y en pleno ataque de chorlitez aguda voy detrás del bicho para descubrir que además por allí había otros dos o tres muñecos escondidos, y allá que me meto bajo la cama iniciando una operación de espeleología subcamera a la caza de bichos de peluche. Trabo al pulpo y al pavo tuerto y trato de salir … estooo … que no salgo …. grrrrrr … que me he trabado … que me estreso …. que se ríe el Gafapasta y dice mira que eres tonta monina … yo "monina no, perrina linda" y él "lo que quieras, pero tonta del chirimiri que no sabes salir" … es verdad, sé salir pero no puedo … lloriqueo … lloriqueo … lloriqueo …

El Gafapasta se apiada de mí, tira del collar y me saca un poco a rastras y con la dignidad hecha unos zorros, pero estaba yo tan nerviosa y agobiada que la dignidad me daba completamente igual, así que una vez liberada fui a besarle y lamerle para darle las gracias, hasta que me parece que ya está todo bastante agradecido y decido volver de nuevo a la maldita cueva a buscar al hurón de chochiflex y una especie de buitre más feo que Montoro pero que grazna con mucha más gracia. Otra vez a empezar, que si trabo los juguetes, que si me trabo yo, que no puedo salir, que el Gafapasta se ríe y vuelve a llamarme tonta, Gelo bosteza, las gatas me ignoran, yo pues como me vuelvo a estresar lloriqueo y pido auxilio, nueva operación rescate y nuevos lametones.

Recuerdo, eso sí de pronto, que había bajo la cama-trampa un precioso cerdo rosa fucsia que me tiene enamorado el alma y como los exploradores del XIX digo "¿Quién dijo miedo? ¿y si bajo la cama encuentro las fuentes del Nilo, Stanley?" . Trabo cerdo, cama traba perrina, Gafapasta me llama de todo, las gatas se ríen con muy mal bigote, Gelo ronca, yo me estreso y lloro. Nueva misión rescate, nuevos lametones con la dignidad ya definitivamente perdida y el Gafapasta mirándome con lástima y diciendo "qué poca vida hacemos de ti, mira que nos saliste tontuca", y yo le vuelvo a lamer y …

Vaaaaaaaale, yo me voy a una esquina, me tumbo encima de dos peluches gigantes que le habían regalado al Chico Guapo cuando estaba malito y me hago la dormida. Porque el ridículo ya me parece que lo había hecho bastante. 

Para que luego digan que la espeleología no es deporte de alto riesgo. Maldita cama, te vas a enterar: esta noche vuelvo.

martes, 10 de febrero de 2015

ANCHO DE CAMA


La verdad es que una se despierta algunas mañanas a trompicones y sin la dignidad mínima para encarar el día interpretando el duro y exigente papel de poligonera chunga. Por ejemplo, cayéndote de la cama.

Caerse de la cama es más de chicos tochunos, que el Gelo se cae bastante, pero esta mañana he sido yo la afectada por ese ser perverso llamado Ley de la Gravedad. Que por muy tipín Bershka que tenga una, cuando pierde puntos de apoyo suficientes se esmorra como cualquiera.

Lo peor de todo es que con el rotundo cataploff del momento contacto perrina-suelo se despiertan todos, todos te miran con cara de "mira que eres patética, cari" y por mucho que una diga bostezando "patética no, yo perrina linda" se ríe hasta la gata tonta. Y lo peor de todo es que tienen razón, qué poca dignidad hay en el suelo.

No es que tenga yo toda la culpa eh. Que a ver, cuando una está dormida como una ceporra pues a veces se da la vuelta y se cae sin querer, como si no os hubiera pasado a vosotros. Y además hay que tomar en consideración varias atenuantes. Por ejemplo, que el Gafapasta ha echado otro michelín y ocupa muchísimo, que las malditas gatas tienen frío con las heladas de temporada y han abandonado su mesa camilla habitual para venirse a dormir en tribu, que Gelo es un jeta y se estira muchísimo y quiere toda la cama para él, que la cama es sólo de 1'35… Así no hay quien duerma a pata suelta o se estropicie los huesos con mal posturamen, por lo que me he decidido a tomar cartas en el asunto. Voy a expulsar a las gatas al pasillo, voy a morder a Gelo, voy a obligar al Gafapasta a una dieta de col de bruselas (sí, he dicho col, sin plural) durante un año y voy a abrir una suscripción popular de esas que ahora llaman guaufounding para comprar una cama de 1'50, colchón XXL y barras de seguridad.


martes, 3 de febrero de 2015

CULPITAS AL POR MENOR


Jo, hace tan malo y es tan aburrido es de estar frío que te frío y llueve que te llueve que no nos queda más remedio a Gelo y a mí que volver a jugar al viejo y divertidísimo juego de "Cabrea al Gafapasta". El juego consiste en que primero la liamos de forma indeterminada. O la lía Gelo, o la lío yo, o la liamos al alimón. Total, como el Gafapasta no está en casa no sabe quién ha escarbado en el colchón o ha realizado un despiece científico-tecnológico del mando a distancia del DVD. 

La segunda fase consiste en que el Gafapasta llega a casa y se mosquea, pone voz de sargento capullo, nos manda a la mierda y nos señala el destrozo. Sin personalizar, porque como no sabe quién ha sido, pues prefiere socializar la regañina. Los dos ponemos cara compungida y gesto de "a mí no me mires que yo no he sido", pero él vuelve a vociferar y entonces yo salgo corriendo y me acomodo en el sofá del salón, que es casa. Gelo, como es tirando a tordo pero que muy tordo, se queda al lado del Gafapasta, le mira con cara de cachón dormido y encoge la cabezota como diciendo "Perro bueno, perro bueno, no me pegues o por lo menos no me pegues muy fuerte". Entonces el Gafapasta se cabrea más, porque dice que cualquiera que le vea qué se va a pensar, que él no nos pega (eso es verdad, a veces nos pisa pero de puro patoso y despistado, no por maldad). Y recoge los destrozos todo malhumorado y dice que no nos quiere volver a ver. Pero luego nos saca de paseo y nos pone comidita rica y al final se ablanda y nos deja dormir calentitos a su lado. Eso sí, cuando se vuelve a marchar nos reímos y comentamos los gritos, las caras y los berrinches.

Yo llevo una temporada rebeldona, así que de vez en cuando le contesto toda raquerona:

-Oye, Gafapasta, que por qué nos echas siempre la culpa a nosotros, que las gatas también rompen cosas.

-Ya, pero las gatas rompen la tapicería del sofá porque se están afilando las uñas las muy grpfs%%rdas y eso son instintos. Y además lo hacen a la cara de todo el mundo, no como tú, que eres muy zorra.

-Zorra no, yo perrinalinda.

-Espera, que me parto. Ja, ja, ja.

-Además, también han roto vasos y platos.

-Pues sí. Y tú también.

-….

-….

-Cómo te pones por nada, Gafapasta.

-Te voy a dejar sin paga un mes y ya verás qué divertido.

-Pues mira, pues mejor. Ya te venderé las joyas.

-Qué graciosa.

-Qué majo.

-Hale, rica, a tomar vientos.

Y entonces yo me voy al parque a correr como loca del chirimiri, que por frío que sea, es más megadíver tomar vientos gélidos del norte o cierzos que estar todo el rato mirando la cara de culo del Gafapasta cabreado. 

domingo, 1 de febrero de 2015

EL ALCALDE TIENE POCAS LUCES


Pavisoso nos odia. Y eso que este barrio está lleno de perras del PP que le votan sí o sí sin que nadie entienda muy bien por qué visto cómo maltrata al barrio. Si ya era bastante con un IBI idéntico al de los barrios llenos de servicios, las obras sin terminar, la dejadez policial en general o el ruido horrible de los camiones de la basura a las cinco de la mañana, ahora se suma la oscuridad en la que nos deja sumidos dos días de cada tres.

A ver, que a mí me da un poco igual, porque yo soy perrina linda pero poligonera miedo no tengo y además me parece que la oscuridad es una gran oportunidad para ser malota y morderle la pantorrilla a la vecina bruja sin que sepa quién ha sido, pero que un día con lo patoso que es el Gafapasta nos vamos a hacer un lío de patas y correas, nos vamos a caer y nos vamos a dejar los colmillos en mitad de un escalón. 

El Gafapasta dice que lo mismo es cosa de los recortes, y entonces pienso yo que el problema es que el alcalde tiene pocas luces y no le llegan para todos los barrios y entonces a los que no somos del escaparate pijo de la ciudad nos toca luz un día de cada tres y los otros dos nuestras bombillas cambian de farola. Pero a mí me convence mucho más la idea de que nos tiene manía y nos quiere rendir por ruido, por oscuridad y por hartazgo. 

Te voy a ir avisando, Pavisoso, que como nos estrellemos y nos hagamos pupina, o nos violen al Gafapasta o nos roben los collares a juego te va a caer una demanda que vas a flipar, cariño.

lunes, 19 de enero de 2015

AUSENCIAS DE TIBERIO


No es tan tonta la Tiberio, últimamente, que se ha enterado de que mi blog es ya hasta concursante y se quiere hacer famosa a mi costa. Dice que si Paquirrín y Chabelita ocupan portadas y la Belén Esteban se ha convertido en la reina de los polígonos a base de dar alaridos en la tele, pues ella puede ser famosa siendo absurda, pre-inteligente y gritando su terrorífico y desagradable "MÑAAAAAAAAAAAAA" allí donde se la requiera.

El caso es que ha vuelto a regalarnos una de sus tradicionales ausencias. O sea, que cuando cae la noche y los perrines lindos regresamos del frío parque con el Gafapasta, ella hace un par de giros para esquivar las piernas del jefe y se va a la escalera a investigar cosas tan trascendentales como el concepto barandilla o la esencia metafísica del quinto piso. Porque ella, aventurera y valentona que es, del descansillo no se mueve que le da mieditis. El Gafapasta, para hacer honor a su fama, ni se cae con el bichu negru ese entre las piernas, ni se entera de nada, cierra la puerta, pone música y hasta luego lucas.

A los demás, tampoco es que nos importe mucho el tema, si es absurda que lo sea pero sin molestar, que si por Darwin fuera se había extinguido la ridícula de la Tiberio como poco en el Mesozoico. Anabotella, la gata mala dice "que se joda, que yo me quedo sin alcaldía y no voy por ahí dando la lata". Gelo, cada día más memo, dice "Ayayayayayayayayay, Tiberio, ayayayayayayayay" todo nervioso y de ahí no le sacamos. Y yo, pues hago lo mío, que es avisar al irresponsable del Gafapasta y ponerme a contarlo todo en el blog. A ver si estos se creen que voy yo a abrir la puerta y decirle a la gatuna "A ver, cariño, Tibitiberio, que te as a constipar, éntrame en casa y tómate el pollo".

-GAFAPASTAAAAAA.

-Queeeeeeeeéeee.

-TIBERIO, QUE FALTA.

-Qué le falta ahora a esa mema.

-NO, QUE NO LE FALTA NADA, BUENO NADA QUE NO LE FALTARA HACE CINCO MINUTOS, QUE LA QUE FALTA ES ELLA.

-Está debajo de la mesa camilla, como siempre.

-QUE NOOOOOOOOOO.

-Hala, perrinalinda, deja de dar la tabarra, que ya saldrá de algún escondrijo cuando tenga hambre.

-IMBÉ… MEJOR ME CALLO.

-Eso, mejor.

A eso de las nueve de la mañana, aviso del vecino. "Gafapasta, que tenías a la puerta encogida, amodorrada, atontada, helada y estupidizada una especie de bicha absurda, y que la tengo yo en casa toda acongojada". Me mira, le miro, no hace falta que le diga qué pienso de él ni que le diga ya te lo dije, y tampoco hace falta que el diga nada, así que se limita a toser, a visitar al vecino y a traer a casa a la Tiberio, toda feliz, diciendo "MÑAAAAAAAAAAAA de esta tengo otro capítuloooiauuuuuu". Y yo, que es que me paso de buena, voy y se lo dedico. Más que nada por dejarla en ridículo y que os quede claro a todos que si yo digo que Tiberio es tonta es porque es tonta pero mucho, y no porque le tenga manía. Que también.

martes, 13 de enero de 2015

HOUSTON, HOUSTON, TENEMOS UNA TIBERIO


Cualquier seguidor habitual de mi blog o del de Mami Glenda tiene por dogmas de fe que Tiberio es tonta, pero muy tonta. Tirando a desagradable, vampira calórica y gruñona para terminar de arreglar el cuadro. 

En estos últimos meses, sin embargo, parece que años de tratamientos neuronales, visitas al especialista y mordiscos a escondidas, hemos conseguido que por fin, a sus doce añazos, espabile. A ver, no os pongáis tan contentos, que no ha sido cosa de Santa Bernardette: si hablamos de la gata tonta decir que ha espabilado es decir que ya no se va despeluchando por las esquinas de puro estrés estúpido, con esa manía que tenía de querer estar en un sitio y al mismo tiempo lo más lejos posible del sitio, o cosas muy básicas como que ha descubierto que le gustan el atún y las sardinas. Por lo demás, sigue con los ojos saltones a lo criatura de Tim Burton, mirada perdida en el océano de la estupefacción existencial y un melódico sonido en la boquita que más que sonar como un delicado miau miau (Anabotella para eso es casi tan musical como perversa) suena como un desangelado y estridente MGÑAAAAAAAAAA MGÑAAAAAAAA. Todo muy gutural y cacofónico.

El caso es que casi es peor esta Tiberio prenormalizada que la absurda a la remanguillé. Porque a ver, el Gafapasta tiene solo dos manos, cuarto y mitad de paciencia, y últimamente una rara pasión por entrar en MI cama dando patadas para que nos apartemos los demás, el muy egoísta. Pero es que ahora con La Nueva Tiberio el pobre no da abasto y además el resto de la tribu estamos viendo como se nos raciona la vida.

Pues sí, se nos raciona la vida sin cartilla ni nada. A ver, antes la Tiberio comía solo pelotillas de pienso seco, así que si el Gafapasta decidía repartir un poco de pescadito, unos recortes de jamón de york o unas puntitas de pechuga de pollo, todo muy equitativo (seis kilos de pollo para él, una pizquita para los niños, y todo así), pues la Tiberio se apartaba, hacía mohínes y decía MGÑAAAAAAAAAA y corría a esconderse debajo de una mesa camilla. Ahora toca golosina y la Tiberio dice MGÑAAAAAAAAA y se pone a la cola, así que hemos pasado de dividir los cicateros obsequios del jefe entre tres a dividir entre cuatro. Fatal. Antes, cuando el Gafapasta se ponía mimoso y nos hacía cariñines, la gata tonta decía MGÑAAAAAAAAAA (tiene un gran repertorio expresivo, como veis) y se largaba como alma perseguida por Micifuz a esconderse en un cajón de la cocina o mismamente en el tambor de la lavadora; ahora, si tocan mimos Gelo dice "Ayayayayayayaya mimos mimos ayayayayayayaya", Anabotella no dice nada muy digna pero se sube encima del Gafapasta y ronronea la muy zalamera y yo le rechupeteo toda la cara, pero además viene Tiberio y dice MGÑAAAAAAAAAAA y en vez de esconderse se soba contra la mano del Gafapasta muy pero que muy obscenamente. Y hale, otra más a repartir.

Mami Glenda decía que lo mejor que podíamos hacer con Tiberio era invitarla a profesar en un convento de siervas de María o mejor de cartujas para que dejase de gritar de una maldita vez. Y yo creo que Mami Glenda tenía razón. Claro, que a lo mejor con un buen mamporro en la cabezota vuelve a su ser natural y deja de tocarnos los hocicos al resto. Si quiere abandonar su desperdiciada vida de gilipollas me parece bien, pero mis pizcas de jamón y mis carantoñas que no las toque, que muerdo.