domingo, 7 de julio de 2013

ESTRATEGIAS TOCHUNAS: NO NOS MOVERÁN




Que sí, que muy tocho el viejo y muy requeteatontao, pero luego resulta que siempre se las apaña para salirse con la suya. Ya digo yo que estos hippies tienen mucha vida detrás y si no se los ha comido la mugre es que son aptos para la supervivencia, que ya nos lo explicó la de ciencias con el Darwin ese y los cuellos de las jirafas y las mañas de los montunos. ¿Que se extravía y pierde el norte dentro de una caja de cartón? Estrategia lloriqueos compungidos. ¿Que pasa una vecina con pan a la vista en la bolsa del súper? Me siento y pongo cara de ¡hola, soy megabueno y un seductor de los de antes! y mientras ella le dice al Gafapasta que qué rico y qué bueno y qué todo, el chupetea la barra y la vieja se ríe y le da un cacho, y cuando voy yo a pillar, perrina linda pero hambrienta, me dice que no, que para mí no, que si no no llega el pan en casa, la muy jodía. ¿Que se acerca el Alcalde Pavisoso con el modo-gaviota-on? Pues ladra y ladra desesperado y a base de explicar "como te acerques, mardito pajarrao, te como hasta las mollejas" pues el bicho se pira, vampiro.

Como este año ha hecho supermalísimo y megafrío que te cagas, no había manera de saber cómo reaccionaría Tío Harley al calor. Pero en estos días de julio en que contra todo pronóstico el verano en vez de parecer invierno parece primavera mediada y el Gafapasta luce cacha con unos bermudas que le quedan fatal, hemos descubierto que no le hace nada de gracia el bochorno. Y que si se le recalienta el cerebelo, recuerda las viejas movidas guerrilleras y se pone a cantar el No nos moverán. Que ya podían aprender los españoles y pelear un poco con la mitad de ganas que Harley, que les están desmontando el bienestar y de refilón abandonan a muchos más perrines que es un horror y los gastos veterinarios suben al 21% y no se pasa el feo ese de Mont-Orco para que le pueda morder yo bien mordido en los cataplines y luego hacer gárgaras con Listerine para desinfectar el colmillo. Asco de tío.

Que se me va la pinza, colegas, que es que anoche estuve de after en un polígono estupendo de las afueras. Os decía que el viernes al Gafapasta se le ocurrió tomar un café en la terracita del Siboney con unas amigas chifladas que tiene y nos llevó de decoración ambiental. Cerquita del mar y con sombra. Pero luego le dio la fiebre andarina y aunque eran las cinco y pegaba el sol que te licuaba la lengua, empezó que si para acá, que si para allá, que si vamos a aprovechar lo bueno que hace, que si vamos a sudar de lo lindo. Hasta que Tío Harley ladró ¡BASTAAAAAA! porque el pobre estaba ya poco hecho y yo cocida al punto. Y en pleno Paseo de Pereda todo lleno de peña irresponsable en busca de la insolación perdida se dejó caer en un paso de cebra cuando cruzábamos. El Gafapasta tira de correa y dice ¡vamos, Harley, guapo! y nada. Recula porque ve que se nos vienen los coches encima y dice ¡venga, Harley, arriba! mientras la peña mira fatal al Gafapasta que al tirar de la correa ha arrastrado un poco y empiezan a decir que estará malo el pobre (el pobre es Tío Harley, no el Gafapasta) y el Gafapasta se pone a juego con el polo rojo que lleva con los bermudas horribles. Hasta que a la desesperada, Gafapasta da un paso a la derecha, en dirección cuesta arriba, dirección casa y dirección sombra, que casualmente eran las tres las mismas. Y Harley guiña el ojo a la multitud y empieza a subir el Tourmalet como si no hubiera pasado nada.

Porque el Gafapasta es poco sensible y no se había enterado de que el viejuno ya había intentado girar hacia casa cuatro veces, así que tuvo que tomar el pobre medidas drásticas.

Luego dirán que soy yo la trasto y la liana. Qué injusto es el mundo.

#Cosasquenomolan : El Gafapasta cubriendo kilómetros de asfalto recalentado como si le fuera la vida en ello.

#Cosasquemolan: Las salidas revolucionarias de Tío Harley y lo fresquita que esperaba el agua en casa, ay.

No hay comentarios:

Publicar un comentario