miércoles, 13 de marzo de 2013

EMPIEZA EL DÍA CON ENERGÍA




Pues sí, peña, a mí lo más que me gusta es correr y correr. Todavía más que hacer posturitas cazadoras y que comer patatas con ketchup. Que estoy hecha toda una correveiladra, ay.

Así que esta mañana cuando bajé al parque con Tío Harley y el Gafapasta me lo pasé chupibomba con una braca jovenzuela y atolondrada como yo que se llama Dana y que también fue la pobre abandonada en la perrera de Santander, pero la salvó una chica majísima. Y a esta braca que es también perrina linda pero no tanto como yo pues le gustan la juerga y las galletas, así que en cuanto nos cogimos confianza, que no va a echar una carreras con cualquiera, empezamos a jugar y a jugar y a correr y a correr. Yo ganaba siempre, que nunca me pillaba si no hacía trampa y recortaba perímetro, y eso que ella estaba suelta y a mí el Gafapasta me tenía cohibida, restringida, encadenada y amarrada.

Es que decía la chica de la braca que en cuanto la llamaba y le enseñaba una galleta frenaba en seco y se iba a picotear vicios. Y yo le dije al Gafapasta que yo era perrina buena y que por qué no me soltaba un rato para jugar más loca del chirimiri todavía. Y me dijo que no, que no se fiaba de mí. Y yo me puse muy triste y le dije que la Dana jugaba con ventaja y que había mucho parque para correr y que le prometía no irme de cañas por ahí y que ya se podía fiar un poco, que yo había cambiado mucho. Y va y me salta, ya claro, guapa, por eso ayer mientras jugabas con una canija peluda se te salió la cabeza del collar y en cuanto te diste cuenta dejaste de jugar y saliste disparada. Y yo rumiando para dentro, ya me tuvo que tocar de jefe el memorión este, porras. Nada que hacer, por más que le dije que sólo había corrido un poco para que no se me olvidara y que enseguida me dejé enganchar y que le quiero mucho, pues no dio su brazo a torcer, que está de un jefón que asusta.

Así que tuve que conformarme con dar vueltas en círculo hasta que me mareé y se me cayó la braca encima y entonces nos revolcamos y nos mordimos y nos pusimos perdidas las dos y fue todo muy divertido pero menos.

¿Qué decís? ¿Que dónde estaba Harley? Pues un poco atocinado, como siempre, sentado y mirando al Gafapasta con cara de borrego degollado, que yo creo que se ha enamorado el viejuno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario